Ciudad de México, 14 Nov (El Informador).- En un momento de madurez artística y personal, Alexander Acha se encuentra en una nueva etapa de su carrera: una vuelta de tuerca que lo lleva a sus raíces, al corazón del mariachi y la música regional mexicana. Su más reciente sencillo, “Pa’ encontrarnos”, marca el inicio de un proyecto que combina tradición y autenticidad con la sensibilidad pop que siempre ha caracterizado al cantautor. La canción es la primera incursión oficial de Alexander en el regional, sin abandonar su esencia romántica, entregando a sus fanáticos una melodía en la que se llama al reencuentro con uno mismo y sanar el amor propio para volver a conectar con el otro.
Alexander cuenta que su llegada al género regional fue resultado de un proceso largo y orgánico. “Se dio de una forma muy natural. Llevo ya varios años queriendo sacar un proyecto de mariachi”, comparte Alexander Acha en entrevista con EL INFORMADOR. “Empecé a componer canciones y a reunirme con autores, a recibir temas de este género desde hace algunos años. Hice pruebas, maquetas y demos para encontrar un sonido donde me sintiera cómodo y auténtico”.
El punto de inflexión llegó este año, cuando las circunstancias se alinearon. Tras su participación en el programa “Juego de Voces” donde interpretó temas de mariachi junto a otros artistas, la reacción del público fue tan positiva que decidió lanzarse de lleno. “Gustó mucho, hubo una respuesta muy bonita. Dije: ‘pues ahorita es cuando’. Empecé a componer canciones, a reunirme con autores, a hacer maquetas y demos para encontrar un sonido donde yo me sintiera cómodo y, al mismo tiempo, auténtico”.
Así nació “Rosa en el desierto”, su primer tema en solitario dentro del género. Poco después, el manager Alex Jiménez se acercó a él tras escuchar su interpretación y le propuso formalizar un proyecto de mariachi. “Yo llevaba años queriendo hacerlo, pero no tenía al equipo correcto. Con él todo se dio naturalmente”, dice Acha. De esas reuniones surgió “Pa’ encontrarnos”, canción que hoy se erige como punta de lanza de un álbum que el artista irá revelando poco a poco.
Para Acha, este paso representa mucho más que un cambio de estilo: es una renovación emocional y creativa. “Ha sido un género nuevo, sí, pero me he sentido muy cómodo. Me refrescó el alma. La música mexicana tiene mucho que ver con mi forma de ser artística: la pasión. Siempre he sido muy apasionado y emotivo, y la música mexicana es justamente eso: sentimiento, pasión, emociones. Me siento muy cómodo cantándola. Por ejemplo, me siento más cómodo con el mariachi, que escucho desde niño, porque soy mexicano y es con lo que más me identifico dentro del regional”.
“El mariachi es el subgénero que más me gusta. En cambio, si me pidieras cantar algo más urbano, no va tanto conmigo ni con mi manera de interpretar. Con el mariachi me siento verdaderamente en casa”. En sus conciertos actuales ya hay un segmento dedicado al género. “Voy migrando entre diferentes estilos: pop, cumbia, mariachi… y la gente lo disfruta mucho. Es un recorrido por todas las facetas de mi vida artística”, comenta Alexander.
Alexander Acha comparte que su proceso creativo está profundamente ligado a las emociones. El mariachi, además, lo ha retado como compositor. Su nuevo álbum estará construido principalmente sobre bases de mariachi, aunque incluirá fusiones con otros subgéneros mexicanos. “Cuando estoy solo y siento que mi corazón es como un cántaro que se va llenando, llega un momento en que se tiene que vaciar, y se vacía en canciones. Cada género tiene su manera de decir las cosas. Como autor, me gusta esa mezcla entre mi estilo y el lenguaje propio del mariachi. Eso le da autenticidad, evita que se sienta como algo forzado o de moda. Hoy ya se vale todo”, dice entre risas, “pero la esencia sigue siendo el mariachi”.
Sin duda, Acha vive un momento de renovación artística sin perder su esencia. “Me siento como una serpiente que cambia de piel: sigue siendo la misma, pero se renueva. Todavía tengo muchos sueños por cumplir y sé que apenas estoy en camino”, confiesa. Con “Pa’ encontrarnos”, el cantante no solo abraza la tradición mexicana, sino que también se redescubre a sí mismo. En el mariachi ha encontrado una forma de volver a lo esencial, de cantar con el corazón y reconciliarse con su propia voz.
Hasta ahora, la reacción del público a su más reciente propuesta ha sido cálida y curiosa. A la par de esta nueva faceta, Alexander prepara el lanzamiento de un sencillo navideño, una pieza alegre y luminosa con la que cerrará el año. “La respuesta general ha sido muy buena. Siempre hay quienes necesitan más tiempo para convencerse, pero eso es parte del proceso. Algunos se enamoran a la primera, otros necesitan cuatro canciones”, dice el cantante con humor.
En la conversación, Alexander no solo habla de música: también reflexiona sobre la madurez que le ha traído la vida familiar. “Me siento muy bendecido, pleno. Tengo mucho amor a mi alrededor, pero también he trabajado por ello. He aprendido a balancear el trabajo y la familia, y diría que la familia es más importante, porque es tu estabilidad emocional”, afirma con serenidad. “Uno puede perderse un poco entre viajes, fans, premios… La familia te aterriza. Te recuerda quién eres, te jala a la realidad”, añade.