Javier Bardem y los premios

Madrid, 4 May (Excélsior).- El actor español Javier Bardem se hizo acreedor al Premio Platino este domingo gracias a su trabajo en El buen patrón, cinta de Fernando León de Aranoa que triunfó en la ceremonia al llevarse a casa cuatro preseas, entre ellas la de Mejor Interpretación Masculina gracias al trabajo que realizó al darle vida a Julio Blanco, el dueño de una fábrica de básculas que manipula maquiavélicamente a sus empleados.

«No me cansan los premios, en absoluto, los recibo siempre con la misma sorpresa porque hay un punto interior en el que se piensa que no me puedan premiar por nada. Yo simplemente hago lo que debo hacer, porque ésta es una de las pocas profesiones en el mundo en la que se dan premios.

Cuántas profesiones hay en el mundo que son tan importantes y en donde no se dan premios y aquí nos premiamos mucho”, contó entre risas Bardem a los medios de comunicación internacionales, entre ellos Excélsior, después de haber recibido el Platino.

El hijo de la finada actriz Pilar Bardem recibió este fin de semana su tercer Platino luego de que en 2018 se hiciera acreedor al primero por su trabajo en Loving Pablo y en 2019 recibiera el Premio Platino del Público por el filme Todos lo saben.

En el caso de El buen patrón, Bardem, ganador de un Oscar en 2017 a Mejor Actor de Reparto por Sin lugar para los débiles, repite mancuerna con el realizador Fernando León de Aranoa luego de haber hecho Los lunes al sol y Loving Pablo, hace veinte y cinco años.

«Hace cuatro años Fernando me habló de este proyecto en el Festival de San Sebastián y de inmediato le dije que sí. Con él lo que sea, pero es verdad que soy muy pesado y quiero leer y quiero estar seguro de lo que me llega es algo que yo me crea capaz de hacer para poder devolverle el favor”, contó el actor de 53 años. La cinta El buen patrón, aún sin fecha de estreno en México, es una sátira empresarial en donde un hombre, con tal de ganar un reconocimiento, es capaz de cruzar las líneas de lo que es correcto.

«Yo sé que Fernando es un director que tiene siempre una impronta social importante y en este caso se asomó un poquito más a la comedia, a la ironía, a la mala leche y a un humor negro fuerte que hecho de la historia algo muy digerible para el gran público”, contó Bardem.