Rubén Ochandiano acusa a Alejandro G. Iñárritu

Ciudad de México, 20 Feb (Cine Premiere).- El apellido Iñárritu ha estado en boca de todos desde que se estrenó su película Bardo, Falsa crónica de unas cuantas verdades. Pero, ahora, uno de los actores con los que trabajó en otra de sus producciones habló del director por otra razón muy diferente. Se trata de Rubén Ochandiano, a quien Alejandro González Iñárritu habría querido despedir de la filmación de Biutiful por ser homosexual.

Así lo reveló el actor durante una entrevista en el programa La Script. Durante la charla, Ochandiano mencionó que no la pasó tan bien en el set de la cinta estelarizada por Javier Bardem, que no es de las mejor recibidas del cineasta. Según cuenta, al descubrir que era gay, el cineasta ya no quería que participara en la producción.

“Nosotros tuvimos una cosa fea la verdad, y es que cuando se enteró de que me gustaban los chicos me quiso echar”.

Se ha hablado mucho de que las filmaciones de las películas del realizador son complicadas, y al parecer el intérprete lo puede constatar, pues en algún punto de la entrevista aseguró: “Sí, lo pasé fatal, la verdad”.

Pero, aún con esta declaración, y tras mencionar que en el set se corrían rumores de que “¡Lo van a echar!”, Ochandiano dijo no tener nada en contra del cineasta. Incluso, cuando la presentadora del programa se mostró sorprendida con la actitud homofóbica de Iñárritu, Rubén aseveró lo siguiente, dejando claro que le gustaría volver a trabajar con él:

“También era otra época. Es verdad que era absolutamente otra época”, dijo. “En aquel momento Alejandro, que es el director más interesante con el que he currado nunca, al que de verdad tengo mucho cariño y con el que me fliparía volver a currar”.

Además, añadió que el director se mostró incómodo durante la filmación por un accesorio que el actor llevaba en su oreja. Él lleva un arete en la oreja derecha y, aunque la aparición de este accesorio sí estaba incluida en el guion del filme, ahí se mencionaba que el personaje, un policía, debía usarlo del lado izquierdo. Según lo que recuerda Rubén, Iñárritu creía que el arete del lado derecho daba el “mensaje” de que el policía era gay. Esto dijo:

“Yo llevo un pendiente en esta oreja. En la película el personaje también lleva un pendiente, metido en diálogo además, y él me preguntaba: ‘¿por qué llevas el pendiente en esa oreja? Y yo decía: ‘pues porque sí, no sé’. Pero entró en una especie de paranoia de pensar que tenía un mensaje, y entonces en la película llevo el pendiente pegado con pegamento en la otra oreja”.

El director nunca ha mencionado nada al respecto. El rodaje se llevó a cabo en 2008, una época en la que ya había aceptación hacia la diversidad sexual.